Nos acaban de comunicar del fallecimiento de Juan José Armendariz, antiguo alumno clave en el asentamiento del espíritu salesiano en la Comunidad Navarra. Casualmente hace unas semanas solicitamos, a su íntimo amigo y compañero en mil vicisitudes, José Luis Orduna escribiera un artículo para nuestra web y revista. Os hacemos partícipes de este documento. Muchas gracias José Luis. Descansa en paz Juanjo. Siempre estarás presente en la asociación y en el Trofeo Futbolístico Boscos.
EL HOMBRE
Nacido en Tolosa el 30 de diciembre de 1932. A una con la guerra llegó a Pamplona e hizo cursillos de Aspirantado en los PP. Reparadores, en Puente la Reina, Bera y Madrid. En los primeros años de la década de los cincuenta regresa y sus primos Izco Herrero le sitúan en órbita salesiana, que no abandonará. Casado en 1960 con Milagros Tirapu tuvo descendencia con Anabel, Juan José, Susana, Imanol e Izaskun. Tres nietas y tres nietos. En vida laboral fue vendedor de máquinas de escribir y agente de la capitalizadora salesiana INCESA. Entró al Banco de Bilbao el año de su matrimonio y en 1968 abrió como Director la primera oficina en Pamplona de Caja Laboral, donde permaneció hasta su jubilación, en los años noventa.
LOS HECHOS
En la narración de acciones, es más fácil citar lo que no ha hecho que lo practicado. Fue nombrado directivo de la Asociación, como Vocal de Cultura, el 11-6-56. Un año después es Vocal de Deportes y ahorma la “Sección Deportiva Boscos, Vocalía Deportiva de la Asociación de AA.AA. Salesianos”, de donde surgirá el Trofeo Boscos y se pondrá a su frente. El 20.7.61 es designado Secretario, vuelve a Deportes y en el 64 consta como Vocal de Círculo Domingo Savio. Figura por vez primera como Secretario General del Trofeo el 5-10-65, cargo que salvo un año de interrupción, no dejará hasta cincuenta años después. En 1968 llega a Vicepresidente, el 69 es Vocal, el 72 Secretario, el 73 adjunto del T.B. que consolidado y en vías propias, no divergentes, hasta deja de figurar en planas directivas donde no aparece el 74,76,77,80, 81,83 y 87 y 88 pese a conducir el Campeonato. Del 2000 al 2008 es Vocal de Relaciones y Organización y recupera jornadas de conferencias, conciertos, convenciones, ampliamente desarrolladas en el Trofeo. Reconocido por la Asociación, “Napardi” le otorgó el “Gallico de Oro”, el Gobierno de Navarra, “a su Trofeo”, la Medalla al Mérito Deportivo y puso en marcha varias ediciones el “Popular de Populares”. Fue ponente asociativo en el saludo al Rector Mayor Pascual Chávez en su visita al Colegio, con ocasión de sus 75 años. Organizador impecable de las Bodas de Plata y Oro, amén de encuentros de participantes y un sinnúmero de celebraciones y epopeyas. Colaborador permanente de esta Revista, hasta hace poco encargado de las jugosas Notas de Sociedad, editor de varios números monográficos deportivos, es con 309 reuniones directivas uno de los mayores asistentes, sin contar las del seno del Trofeo.
COLETAZOS, VAIVENES Y SENSACIONES
Hasta en las mejores familias suceden causas y cosas fantasmagóricas de asombrosa digestión personal. Héteme aquí que tras doce años mudo y veinticuatro revistas desaparecido, vetado o ignorado, salvo mínimas aportaciones, las actuales “fuerzas vivas” vuelven a reparar en mí con un encargo insoslayable. Y si por si acaso entro nuevamente en los designios inescrutables de los que dirigen, hasta ensayo título de futuros seriales, más pomposo que original pues eso ya fue un programa televisivo en los años noventa. En el interín se fueron sin preguntas “Don Goyo”, “Caral”, los teatreros Luis Vicente Azcona y Jesús Garín y José Mari Rodrigo, “El Marqués de Baro” que escribió prácticamente en las primeras setenta y cinco Revistas y se fue modestamente y sin reconocimientos. “D.B.N.”, desde octubre de 1954, ha hecho entrevistas a 120 compañeros, aparte opiniones personales concretas, y han escrito un total de 300 firmas. El caso es que con pandemias y paros, la Asociación quiere hablar del “producto estrella” y con su cabeza visible inicial, Juan José Armendáriz, el hombre del Trofeo Boscos que no está en su mejor momento de forma pues una caída domiciliaria, hace tres años, le ha precipitado al abismo del infortunio con otros dos episodios anómalos de salud que le han restado movilidad, tono de voz, vida normal y agilidad mental. Aún así, atiende llamada y compromiso, sin que actúe la grabadora por sus respuestas pausadas:
– No se recuerda que en tus 50 años de Trofeo estuvieras nunca enfermo, lo que fue una garantía…
-Tuve suerte y salud, es cierto. Pero ahora las cosas están así, suceden y hay que aceptarlas.
– ¿Hoy sería más fácil fundar el T.B.?
– Habría más facilidades que dificultades. Pero sería necesario aplicar el mismo trabajo, más que habilidad, para dar con protagonistas.
– De la primera oleada de directivos que formaron Boscos, Abad, Baranda, Buzunáriz, Orcoyen, Izco, Echarren, Arteaga, Antón, Gámez, San Martín, Iriarte y Ugalde, creo que quedan un par vivos. No se te puede discutir que fueras el fundador del tinglado…
– Cofundador en todo caso. Se formó un equipo de amigos joven y fenomenal y puedo decir que se anticipó un hecho que luego fue frase de imagen en mi trabajo laboral. Aquello fue “una labor de todos” en pro de los demás. Lo que fue publicidad nosotros lo hicimos actividad.
La idea y acción, ese “servicio a los demás”, al entorno, hizo que aquel fútbol, balonmano y montañismo de Boscos, prendiera en satisfacciones. Y en seguimiento popular pues el Trofeo de Campo ha contado en su conjunto con 220 equipos y el de Pista con 113.
– Personalmente me aportó gozo y rentó mucho porque la honestidad general valía un éxito.
– De haber cobrado derechos de autor nos hubiéramos forrado…
– Pero nunca se pensó en tal finalidad. La abundancia era la actividad y con lo que había se hacía gestión. Nunca sobró dinero, había justezas, se llegaba a lo que se podía y aún así se hicieron cosas..
HONORES Y BENDICIONES
– ¿Tienes respuesta imposible para la pregunta tópica y amplia de con qué momento te quedas?
– Con la concesión de la Insignia de Oro de la Federación Española de AA.AA. Salesianos.
Otros numerosos y destacados homenajes no se sabe si eran para su persona o su Trofeo. Daba igual dado lo consustancial de la iniciativa. Y en el fondo y lo mejor, se apreciaba el papel aglutinador de iniciativas hechas desde dentro cara afuera, significadoras de patios de bullicio y campos para el encuentro de colectivos que querían pasárselo bien.
– Has llenado armarios con escritos, circulares, tomos anuales, cartas de ambientación trofeísta, personalísimas de estilo, pero no escribes tus Memorias…
– Ya he volcado parte de mi vida en tanto comunicado, así que no me ha dado por interiorizar o expresar más cosas. Tengo poco importante que contar.
– Fue genial el golpe de efecto y ardid de 1971 cuando se pone brega al “Fútbol Pista” para solventar la brea del patio colegial…
– Es que no se podía dejar sin actividad el Colegio donde había nacido el Trofeo, que siempre lo arropó. Acomodamos las circunstancias y resultó otro acierto.
– ¿Estos “pelotazos sin bolsillo” colmaron sueños de algo grande?
– Para nuestros posibilidades y objetivos ya lo creo que se cubrieron. Se quería acción, relación, cercanía y participación para la ciudad. Los resultados están ahí.
Se dice que desde dentro del bosque no se ven los árboles y el Trofeo alcanzó tal espesura de contenido que puede ser no se le valorara en su justa medida. El Gobierno de Navarra tuvo que crear un Registro de Asociaciones Deportivas y lo inscribió con el número 1, porque no había una competición de estas características.
– ¿Crees que la Asociación y todos los que han estado en su torno, supieron medir la dimensión del T.B.?
– Hay más detalles a favor que en contra. La Asociación creyó en la idea y la apoyó; los que han intervenido, todos voluntarios, han podido apreciar los hechos.
– Lo de Presidente Honorífico y Director de la Fundación Boscos, suena a epitafio para celebridades….
– Mejor enterarse ahora que después. Pero los que nos hemos volcado a la labor y no al aplauso, diremos que eso es inevitable sin que deje de ser agradable.
– Por si entras en beatificaciones, se dice que tenías un defecto: no dejabas margen de maniobra a los que estaban cerca…
– Era mi forma de ser y podía afectar. Si alguien se sintió ofendido tenga mis disculpas…
– Presidentes de Gobierno, Alcaldes, Concejales, Consejeros, Directores, ¿con quién te llevaste mejor?
– Con todos. Mi mérito era ajeno a la relación cordial porque lo que pedíamos era para los demás y no había intereses personales. Todos ayudaron. Con el Colegio nunca hubo fricciones y los políticos ayudaron en su medida. El Trofeo no era tan trampolín para ellos y siempre respondieron.
– Incluso “Orbaiceta y Super Ser” y demás firmas patrocinadoras…
– Javier Orbaiceta fue “cabeza de puente” en una relación profunda. Tuvo entrega mayor de la esperada, igual que la larga lista de colaboradores.
ESAS PERFECCIONES PERSEGUIDAS
– ¿Nos quedaremos sin ver la “Ciudad Deportiva Boscos”?
– Eso son palabras mayores. La Fundación Boscos se creó para sostener económicamente al Trofeo, si algún año fallaba el apoyo institucional. Sueño imposible. Pocas veces se ha sopesado dar ese salto.
Pero cuando en la calle Aoiz, al final de Aralar, existieron unos misteriosos terrenos de la Congregación, donde vivían los padres de quien fuera Consiliario, Casimiro García, alguna mirada y aspiración se dieron, sin mayor consistencia.
-Fallamos en la experiencia del “Torneo Femenino” tras cuatro años de pruebas…
– Fue un fracaso final tras cumplir un encargo del Gobierno. Fuimos adelantados al auge que luego se ha vivido. Faltó creencia…
– Es curioso reparar en que el balonmano Boscos campeonil no ha tenido tanto eco en archivos propios…
– Un poco culpable soy yo que me tocó depurar papeles en Secretaría. No se guardaron muchas cosas de los primeros tiempos y del final había actas de las que se prescindió.
– Con tu “plancha de quehaceres”, el currículo, no te faltaron invitaciones para catapultar tu persona y te resististe…
– Pude llegar a la política pero ya era tarde para mí y además, consulté con la familia y me hicieron desistir. Una candidatura a la Federación de Fútbol resultó compleja y en elecciones para otras entidades, aprecié frenos para sitios muy determinados. Me quedé donde estaba muy bien.
Al cumplirse los cincuenta años de Trofeo, Armendáriz dejó la Secretaría General tras unas fastuosas Bodas de Oro. En trece ediciones posteriores han desfilado cinco encargados distintoas lo que da una idea del arrojo personal tenido. La Competición ha tenido 240 directivos.
-Es un sillón complicado, de mucho trabajo y gratificaciones que tienes que buscarlas en tu interior.
– Llegaste a ser profesor en Nocturnas. ¿Podrías dar conferencias de conciliación familiar que explicaran tu organización para llegar a tanto y a todo?
– Dí clases de geografía y tuve de alumno al montañero Ariz… La familia ha contribuido sustancialmente a mi vuelco de ocio ajeno.
– Paradojas a citar. Sin ser puro montañero, tuviste compañeros que practicaron este deporte y una hija fue encargada de refugio. Llegaste a la cima por otros caminos…
– Pero asistí a varias Finalistas en la época de Sevillano, o sea que ascensos los domingos que no tocaba Trofeo ya alcancé. Y en el fútbol también había goles de altura…
-Una curiosidad final. Los primeros años te especializaste en situar al público en las respectivas bandas, cuyas líneas no se respetaban por la pasión general. Aquella vara que empleabas sería de la leñera del rincón frente a la Cruz Roja. ¿La guardabas de una semana para otra?
– …….
Una sonrisa guarda el secreto a falta de anécdotas que Armendáriz ya no recuerda con frescura y profusión y sin lamentos, por la época que le toca afrontar. Es seguro que dirá en silencio “ahí queda eso”, con un futuro por delante que hay que seguir labrándolo porque los “doce hombres sin piedad” para el pasotismo, de la inicial Sección Deportiva Boscos (relación publicada en el nº 37, Novbre. 1957 y en el 273 junio 2008) tienen continuidad en nuevos directivos prestos a seguir dando el lustre merecido al Trofeo Futbolístico Boscos, bandera asociativa que nació modesta y hace tiempo es enorme. No llegar, sino mantenerse, dicen de los que tocan plumas de fama. En esas se encuentra un Campeonato aficionado con vitolas de perfección organizativa, hoy varado y parado por la pandemia. En la red social “Facebook” y bajo entradas de “Trofeo Boscos” y “Trofeo Futbolístico Boscos” se albergan comentarios actuales e históricos.
ROJLO